INCONMOVIBLE Hebreos 12: 26-28

“La voz del cual conmovió entonces la tierra, pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo.
Y esta frase: Aún una vez, indica la remoción de las cosas movibles, como cosas hechas, para que queden las inconmovibles.
Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia”.
En ese mismo contexto dice la palabra que en aquel entonces la tierra fue sacudida; pero en el futuro no solo la tierra será sacudida sino también el cielo, es decir habrá un sacudimiento.
“Sacudimiento”, habla de una conmoción; viene de la palabra seio del original griego que significa: mover, denota hacerlo violentamente, sacudimiento de un lado a otro y se traduce al castellano con la palabra “sismo”. Cada vez que se habla de un sacudimiento telúrico, se habla de ese mismo concepto, (terremoto).
La palabra de Dios quiere decir que vendrá un sacudimiento en sentido universal, y ese sacudimiento será provocado por la presencia y la gloria de nuestro Dios, nuestro Señor. Habrá una gran conmoción que generará inclusive juicio, pero los que recibimos el reino inconmovible permaneceremos en la presencia de Dios.
Este contexto no solamente ilustra y habla de la presencia y de la gloria de Dios, también se refiere a cosas que pueden acontecer y suceder en el desarrollo de la vida del creyente, en lo que es y en lo que hace. Vemos que en la tierra, en la sociedad, hay sacudimientos, hay crisis, hay momentos difíciles, ocasiones que se presentan que cualquier persona siendo vulnerable, en un área puede ser tocada, sacudida, remecida, removida y movida, mudada hacia otro sitio fuera del propósito y fuera de los planes divinos.
Hoy quiero hablarle a aquellas personas que de alguna forma están atravesando por un sacudimiento en su vida, personas que de alguna forma o de alguna manera saben que a futuro van a pasar por un tipo de sacudimiento o de conmoción, problemas, situaciones y condiciones. Pero a pesar de que todo acontezca, a pesar de que soplen las brisas, los vientos fuertes, que venga la mareada, a pesar que se levanten los infiernos, a pesar de que el río venga con gran ímpetu en tu contra, el Espíritu de Jehová levantará bandera y la Biblia nos dice que si nosotros hemos recibido un reino inconmovible, nosotros también entendemos, siendo parte de este reino, que no seremos sacudimos, no seremos removidos, sino que vamos a permanecer inconmovibles.
Permaneceremos inconmovibles para cuando venga el sacudimiento, los problemas, las condiciones, las situaciones, las adversidades, aun crisis social, crisis económica, crisis políticas, presiones internas y externas, en tu familia, en tu hogar, en tu vida, en tus emociones, en tu crecimiento, en tu proceder, en tu conducirte, en la trayectoria que llevas en tu vida, el diablo también tratará de alguna manera, de alguna forma de sacudir tu vida para que sea movida y para que sea quitada del propósito de Dios.
Jesús le dijo a Pedro: “Pedro Satanás te ha pedido para sacudirte”, es decir, para estremecerte, Satanás te ha pedido para sacudir tu vida, para moverla violentamente de un lugar a otro, pero Jesús le dijo: “no temas porque yo he orado por ti”.
Lucas 22: 30-32
“Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos”.
Satanás te ha pedido para estremecerte en la fe, para sacudirte en la fe, para sacarte del lugar y del propósito de Dios, para sacarte del encause que Dios ha puesto en tu vida, para quitarte de la trayectoria que llevas, para confundirte y para distraerte, Satanás ha pedido eso, pero no temas porque Dios estará contigo.
Cristo ha orado al padre por nosotros, él es nuestro intercesor, él es el que está sentado a la diestra del Padre, del poder de Dios, intercediendo por nosotros, cuando venga la conmoción a tu vida, cuando venga el sacudimiento, cuando vengas a ser removido, las condiciones y las situaciones adversas, sea la presión social, sea crisis financiera, sea crisis económica, sea crisis moral, sea una crisis de una tentación de pecado que arremete contra ti, sea incredulidades, sea duda, sea complejo, Dios estará contigo!! Tu no vas a estar solo porque eres parte del reino inconmovible y Cristo es la roca inconmovible de los siglos.
Si tu y yo estamos sobre la Roca que es inconmovible, puede suceder lo que sea; si tomamos la palabra, creemos en ella, la practicamos, entonces estaremos firmes, edificando nuestras vidas, nuestros hogares, nuestra familia, nuestro trabajo, la obra de nuestras manos, el ministerio, sobre la firmeza de Cristo, que es la Roca inconmovible de los siglos.
Así que puedes declarar: diablo quítate de mi camino, aunque la tierra tiemble y aunque los montes sean echados a la mar, con todo yo estaré seguro y confiado, Dios estará conmigo como poderoso gigante, él peleará por mí y yo estaré tranquilo, no seré movido, no volveré atrás, no seré sacudido, no me moveré, permaneceré firme, no vuelvo atrás.
Alguien está pensando: “pastor pero es que tengo una gran persecución; pastor pero es que el diablo ha arremetido contra mí”… Luego que el pueblo de Israel celebró la pascua en el desierto, sacrificando el cordero y siendo sellados con la sangre, (que es tipo de Cristo y su sangre), Dios pasó por alto el pecado en la pascua y salieron a celebrarle fiesta a Dios en el desierto. Ellos tenían delante el mar y Faraón venia detrás persiguiéndoles, en ese momento el mar se abrió y casi tres millones de personas cruzaron en seco glorificando a Dios; cuando Faraón quiso perseguirles se cerró el mar y allí descendió a las profundidades del abismo.
Vengo a decirte que tu Faraón ya fue enterrado en las profundidades del mar; esos vicios, esas malas mañas, esas ataduras de pecado, ya ese Faraón fue enterrado.
Si de alguna manera has sentido que el Faraón que fue sepultado ha tratado de hacer que vuelvas y atraerte al fondo con alguna condición en tu vida en la que siente que has estado tocando fondo, quiero decirte que vas a emerger a la superficie.
Inconmovible soy, por su gracia, por su favor, por el Espíritu santo que me ayuda, por la sangre del Cordero que me lava, por el arrepentimiento y la liberación del pecado que Cristo proveyó por mí en la cruz del calvario.
Hay una puerta para que yo me arrepienta, para que sea salvo, para que sea libertado para que mis pecados sean perdonados; abogado tengo para con el Padre, a Jesucristo el justo. Me ha dado de su sangre, me ha dado el Espíritu Santo que me santifica, me ha dado la unción, la manifestación del poder de Dios, me ha dado la palabra que es lámpara a mis pies y lumbrera a mi camino, que es vida para mí y medicina para todo mi cuerpo, que es la espada aguda de dos filos, que penetra y que atraviesa todo lo que viene siendo la adversidad del mismo infierno y de Satanás, me ha dado la fe que es el escudo con el cual apago todos los dardos de fuego del maligno, él me ha dado la condición para ser inconmovible, me ha dado su reino, que es inconmovible, permaneceré en él, aferrado a él, agarrado a él, no vuelvo atrás, ni un paso atrás ni para tomar impulso, sigo adelante, adelante en el supremo llamamiento en Cristo Jesús, olvidando lo que queda atrás me extiendo hacia lo que está delante, el que está en Cristo es una nueva criatura, las cosas viejas pasaron ya, he aquí todas son hechas nuevas, ya eso paso, quedo atrás, ya paso y eres una nueva criatura en Cristo Jesús, nuevo soy en Cristo. Esta debe ser tu confesión.
En la continuación de este mensaje trataremos: “Características de una persona inconmovible”.